El concepto de un iPhone fabricado en los Estados Unidos ha sido un tema de discusión candente durante mucho tiempo. De hecho, parece ser una meta tan americana como la tarta de manzana. Sin embargo, la viabilidad de tal empresa es cuestionable. 

El principal obstáculo para la fabricación de iPhones en los Estados Unidos es el costo. Los salarios más altos, las regulaciones más estrictas y la falta de una cadena de suministro establecida podrían hacer que el precio de un iPhone 'Hecho en Estados Unidos' sea prohibitivo para el consumidor medio. 

Además, la infraestructura de fabricación de China está muy adelantada a la de los Estados Unidos en términos de producción de electrónica. Mudar toda la producción a Estados Unidos requeriría una inversión masiva y un tiempo considerable. 

Por último, incluso si Apple decidiera trasladar la producción a Estados Unidos, es poco probable que todos los componentes pudieran ser fabricados localmente. Esto significa que, a pesar de ser 'Hecho en Estados Unidos', gran parte del iPhone todavía dependería de componentes importados. 

En conclusión, aunque la idea de un iPhone fabricado en Estados Unidos es atractiva, los obstáculos financieros y logísticos significan que es poco probable que se convierta en realidad en el corto plazo. Sin embargo, con suficiente inversión y un cambio en las prioridades de producción, no es una idea completamente descabellada.