En la previa del esperado partido de fútbol entre River Plate y Talleres de Córdoba, las fuerzas de seguridad se vieron obligadas a intervenir. Más de 70 individuos, conocidos popularmente como 'trapitos', fueron detenidos por las autoridades. Los 'trapitos' son personas que se dedican a 'cuidar' coches en las inmediaciones de los estadios durante los partidos, actividad que a menudo es considerada como una forma de extorsión.

El incidente ha reavivado el debate sobre la seguridad en los eventos deportivos y la necesidad de medidas más rigurosas. La acción policial fue recibida con opiniones divididas. Algunos argumentan que los 'trapitos' son un problema persistente que necesita ser abordado, mientras que otros ven la detención masiva como un exceso de las autoridades. Este suceso evidencia la tensión existente entre la necesidad de garantizar la seguridad de los espectadores y el respeto a los derechos de todos los ciudadanos.

La seguridad en los partidos de fútbol ha sido un tema de constante preocupación en Argentina. Este incidente pone de manifiesto la complejidad del problema y la necesidad de soluciones integrales que aborden tanto la seguridad de los espectadores como las condiciones socioeconómicas que llevan a algunas personas a recurrir a prácticas como la de los 'trapitos'.