Argentina está experimentando un crecimiento notable en su turismo emisivo, es decir, aquel relacionado con los viajeros argentinos que eligen destinos fuera del país. Este fenómeno está en contraste con la situación de la hotelería local, que ostenta las tarifas más altas de toda la región.

Se ha observado una tendencia creciente de argentinos que optan por viajar al extranjero, a pesar de que las tarifas hoteleras locales son las más elevadas de la región. Esta aparente contradicción podría estar relacionada con una serie de factores, incluyendo la calidad del servicio, la variedad de destinos disponibles y la percepción de valor por parte de los viajeros argentinos.

La alta tarifa hotelera en Argentina también podría estar impulsando a los turistas locales a buscar opciones más económicas en otros países. Sin embargo, esto plantea serias preguntas sobre la salud y la competitividad de la industria hotelera argentina, y su capacidad para atraer y retener a los turistas locales.

A pesar de estos desafíos, la industria del turismo en Argentina sigue siendo un sector económico vital, y su crecimiento continuo es esencial para el bienestar económico del país. Por lo tanto, es crucial que se tomen medidas para abordar estas preocupaciones y asegurar un futuro sostenible y próspero para el turismo en Argentina.