Los profesionales de la salud infantil están cada vez más preocupados por el creciente uso de los cigarrillos electrónicos, también conocidos como vapeadores, entre los adolescentes. Según los pediatras, estos dispositivos pueden tener efectos nocivos a largo plazo en la salud de los jóvenes.

El vapeo puede causar daños pulmonares, riesgo de adicción y un potencial deterioro del desarrollo cerebral en adolescentes. Los pediatras destacan que el cerebro de los jóvenes sigue desarrollándose hasta los 25 años aproximadamente, y la exposición a la nicotina puede alterar este proceso.

Además, existe el peligro de que el vapeo actúe como una puerta de entrada al consumo de tabaco tradicional. Muchos jóvenes que comienzan a vapear terminan fumando cigarrillos regulares, aumentando aún más los riesgos para su salud.

La comunidad médica está haciendo un llamado a los padres y educadores para que se mantengan informados sobre los peligros del vapeo y tomen medidas para prevenir su uso entre los adolescentes. También se solicita a las autoridades reguladoras que implementen políticas más estrictas para limitar el acceso de los jóvenes a estos dispositivos.