La suspensión de las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO) en Argentina ha desatado una ola de especulaciones y disputas internas en el Kirchnerismo. Esta decisión ha provocado una serie de reacciones que ponen de manifiesto las tensiones existentes dentro del partido. 

Aparentemente, la suspensión de las PASO sería una estrategia política para evitar una mayor fragmentación y desgaste del partido. Sin embargo, esta maniobra parece haber exacerbado las divisiones internas, alimentando las especulaciones y el descontento. 

La decisión de suspender las PASO ha generado una serie de acusaciones y pases de factura dentro del Kirchnerismo. Muchos miembros del partido ven esta decisión como una forma de limitar la competencia interna y controlar el proceso de selección de candidatos. 

Esta situación ha llevado a un clima de incertidumbre y descontento, tanto dentro del partido como en el escenario político argentino en general. La suspensión de las PASO ha dejado en evidencia las tensiones y divisiones existentes dentro del Kirchnerismo, lo que podría tener consecuencias significativas para el futuro del partido. 

En este escenario de especulaciones y tensiones internas, es esencial que los miembros del Kirchnerismo logren un consenso y presenten una postura unificada. La supervivencia política del partido y su capacidad para mantenerse en el poder podrían depender de ello.